Evolución de las bombas

Historia

A partir de la segunda década del siglo la estación de servicio americana experimentó una evolución que, en una sola década, la transformaría en la estación de servicio propiamente dicha.

Al simple despacho de combustible se sumó el control de aceite, agua y presión de neumáticos, la instalación de nuevos filtros, bujías y baterías, el lavado de autos, el trabajo de lubricación y otros servicios aún. Al mismo tiempo evolucionó la preocupación por el cliente, que ahora cuenta con refrigerios, sala de espera y servicios sanitarios.

Esto no comenzó en Europa hasta una década después, pero aunque las verdaderas estaciones de servicio eran raras, la mayoría de los establecimientos que vendían gasolina podían proporcionar los servicios complementarios más importantes.

Esta explosión de nuevas mercancías para el automovilista no provino de la generosidad de los vendedores: el curso natural de las cosas se les impuso.

Mientras el sistema se limitaba a la única bomba en la acera frente a la tienda, la venta de gasolina seguía siendo sólo una parte de la actividad de la tienda, un beneficio relativo que era más que satisfactorio.