Equipos industriales

Historia

Cuando el vendedor se encontró vendiendo sólo combustible, se vio obligado por la necesidad a añadir servicio tras servicio para aumentar sus posibilidades de ingresos.

Fue así como las bombas pasaron a ser flanqueadas por otros equipos, grandes y pequeños, que también debían contribuir a la imagen global del lugar y de su actividad.

Estas herramientas y equipos fueron diseñados en gran medida estrictamente para aplicaciones automotrices; en los casos en que ya existía una herramienta para otros fines, se rediseñaba, total o parcialmente, para su uso en estaciones de servicio, talleres mantenimiento y reparación.

Su evolución estética siguió generalmente la de otras herramientas: aportan esa fascinación decididamente industrial que surge de la materialización de una necesidad, de una función, al mismo tiempo que intentan conseguir una mirada, en consonancia con las fuerzas que transformaron los bienes del hogar, medios de transporte y surtidores de gasolina, por nombrar algunos.

Cuando las herramientas o equipos llevan la marca de otro producto, se hace aún más evidente la intención de ennoblecerlos con formas y colores interesantes, o con añadidos decorativos no funcionales.