Historia
Futurismo y cubismo
RegresarEn la Europa de la segunda década, todavía inmersa en la suavidad del Art Nouveau, la publicidad de la gasolina se centró decisivamente en el aspecto elitista del automóvil y de su combustible, y en este botón siguió pulsando al menos hasta los años cuarenta.
La idea de modernidad, ya presente en la publicidad de los Teens (1913-1919), se hizo más evidente en las décadas siguientes, tomando prestados motivos expresivos del cubismo y el futurismo.
En la gráfica comercial de la época, el uso de ilustradores influenciados por las vanguardias connotaba dos mensajes no siempre coexistentes: para los medicamentos, por ejemplo, servía para subrayar la modernidad de las investigaciones de donde procedían los medicamentos; para un chocolate o un aperitivo, el objetivo era identificar el producto con signos de elitismo y refinamiento.
Las dos necesidades coexistieron perfectamente mientras el protagonista fuera un combustible; en el caso del futurismo, las líneas de fuerza y las perspectivas exasperadas se sumaban a la sensación de velocidad motorizada.